(THE EPOCH TIMES) Rudy Giuliani, uno de los abogados personales del Presidente Donald Trump, alegó el 11 de noviembre que se emitieron aproximadamente 650.000 votos ilegales en Filadelfia y Pittsburgh, Pensilvania.
Hablando con Lou Dobbs, de Fox Business, Giuliani afirmó que “casi ninguno” de los cientos de miles de votos fue observado por los observadores electorales republicanos. La ley electoral del estado requiere la presencia de observadores electorales de todos los partidos.
“Ahora estamos hasta el recuento de unos 650.000 votos que son votos ilegales que se emitieron en Filadelfia y Pittsburgh”, dijo. “Lo que se dice en los medios de comunicación, que no tenemos pruebas, es una completa y absoluta mentira, como han estado mintiendo durante años.”
El lunes, la oficina del gobernador Tom Wolf dijo en una declaración que los observadores de todos los partidos han tenido observadores durante todo el proceso y que “cualquier insinuación de lo contrario es una mentira”.
Unos días antes, Giuliani dijo que la campaña de Trump podría tener suficiente evidencia para cambiar los resultados de las elecciones en el estado de Pennsylvania.
Le dijo a María Bartiromo de Fox News el domingo que las demandas presentadas por la campaña de reelección de Trump podrían mostrar que hasta 900.000 votos inválidos fueron emitidos en el estado del campo de batalla.
Según un recuento de votos no oficial del Departamento de Estado de Pensilvania, Biden ha recibido 3,35 millones de votos a los 3,31 millones de votos de Trump. En términos porcentuales, Biden tiene el 49,7 por ciento, en comparación con el 49,1 por ciento de Trump.
“Creo que tenemos suficiente para cambiar Pennsylvania. La elección de Pensilvania fue un desastre”, dijo Giuliani, respondiendo a una pregunta del presentador sobre si la evidencia es suficiente para cambiar el destino de la elección presidencial.
“Tenemos personas que observaron a la gente siendo empujada fuera del lugar de votación. Tenemos personas a las que se les sugirió que votaran en sentido contrario y se les mostró cómo hacerlo. Les estoy dando el panorama general”, dijo.
Mientras se contaban los votos por correo, los observadores del Partido Republicano de Pittsburgh fueron “mantenidos fuera de la sala o alejados de la sala” por un período de 24 horas, alegó Giuliani.
“A pesar de que fuimos a la corte y se nos permitió acercarnos seis pies, la gente de la máquina demócrata movió el lugar de conteo seis pies más lejos. Esto está documentado en una cinta de video. Hay más de 50 testigos”, continuó.
Este lunes, el equipo de campaña de Trump lanzó una nueva demanda con el objetivo de detener la certificación de los resultados de las elecciones en Pensilvania, alegando que los condados demócratas y republicanos no siguieron las mismas reglas en lo que respecta a las boletas por correo defectuosas, y que los observadores republicanos no pudieron ver el proceso de conteo de las boletas desde una distancia significativamente cercana.
“Si eras un demócrata en Filadelfia, se te permitía trabajar fuera de los límites de las restricciones para arreglar las boletas defectuosas, a veces llamado ‘curar'”, explicó Matt Morgan, consejero general de la campaña Trump, durante una conferencia de prensa del lunes. “Pero si estabas en condados republicanos del estado de Pennsylvania, no se te permitía hacer eso porque seguían estrictamente el texto del estatuto en Pennsylvania.”
La demanda también incluye a un trabajador postal del condado de Erie que afirmó que había oído a sus supervisores hablar de votos atrasados ilegales que llegaron tarde para que parecieran legítimos. Su reclamación también fue citada por el senador Lindsey Graham (R-S.C.) en una carta al Departamento de Justicia pidiendo una investigación federal.
GQ Pan contribuyó a este informe.
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